NEUQUÉN (ED) — Desentendidos de la crisis económica que afronta el gobierno de Alberto Fernández -y que padece el país- los referentes del PJ-K neuquino, construyen de cara a los comicios de 2023, lejanos en el calendario pero no tanto en los tiempos políticos.
Ya se conocían las intenciones del secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez (quien participa en cuanto acto le es posible); y ahora se hizo público lo que se sospechaba con fuerza: las renovadas intenciones de Ramón Rioseco.
El comentario de su hermana y diputada provincial por el Frente de Todos, Teresa Rioseco, fue breve pero contundente: “Es el único que quiere y trabaja para ser Gobernador”. Lo acompañó, claro, con una foto del ex intendente de Cutral Co y actual parlamentario del Mercosur.
Ramón y Darío acreditan sus cruces internos. El último fue por la candidatura a gobernador (2019), que Darío pidió dirimir en las urnas y que la ex presidenta resolvió en el escritorio, a instancias del ahora senador Oscar Parrilli. Es él, le dijo a Darío señalando a Ramón.
Unos meses más tarde, Darío intentó la candidatura a senador y volvió a perder frente al propio Parrilli, uno de los más cercanos a Cristina. Ahora, con Alberto en Balcarce 50, Darío se posicionó.
Pero lo primero es lo primero. Y primero están las legislativas 2021 en las que se renovarán tres bancas neuquinas en la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación.
En principio, el Frente de Todos tiene un póker de damas, ya que son cuatro las que se mencionan con posibilidades de encabezar la lista: Lorena Parrilli (diputada provincial e hija de Oscar); Ana Servidio (concejal capitalina y nieta de Antonio Cafiero), Tanya Bertoldi (sobrina del intendente de Centenario, Javier Bertoldi y secretaria de Gobierno de esa ciudad) y Mirna Gómez (ex concejal y ex candidata a intendenta de Villa La Angostura).
