BUENOS AIRES (NA) — El Presidente hizo referencia a la situación económica que vive el país producto del impacto del conflicto bélico entre Ucrania y Rusia y lanzó una nueva frase desafortunada durante el acto de inauguración de la estación Tortuguitas de la línea del ferrocarril Belgrano Norte, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas.
“El viernes arranca otra guerra, la guerra contra la inflación en la Argentina”, agitó Alberto Fernández en referencia a las medidas que adoptará el Gobierno para combatir la inflación. La consigna fue aplaudida por el auditorio compuesto por funcionarios, entre los presentes el ministro de Transporte de la Nación, Alexis Guerrera; el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; la diputada Victoria Tolosa Paz y la intendenta local, Noelia Correa.
La invasión rusa en Ucrania avanza día a día, y la escalada de violencia no cesa. Ya son miles los ucranianos que debieron abandonar sus tierras azotadas por los tanques del ejército comandado por Vladimir Putin. El mundo sigue de cerca lo que acontece en Europa, no sólo por las repercusiones económicas del conflicto, sino porque detrás del armamento militar y de las pujas entre los mandatarios involucrados, hay vidas que fueron brutalmente afectadas por el desenlace de los acontecimientos.
Los dichos del jefe de Estado se dieron en la previa de la difusión del dato oficial de la inflación de febrero y que según las consultoras privadas, se calcula una suba de los precios minoristas por encima del 3%.
“Cuando creímos que estábamos saliendo de la pandemia, comenzó la guerra en Europa. En un mundo globalizado causa efecto desastrosos más allá de las fronteras. Esta guerra tiene repercusiones en el mundo, y también en la Argentina. Esa guerra ha desatado una lucha tremenda por los alimentos, y vuelan los precios de los alimentos en todo el mundo”, argumentó Alberto Fernández.
Y continuó en referencia al expresidente, Mauricio Macri: “Nos cuesta mucho recuperarnos de aquella inflación que nos dejó sin guerras y sin pandemia, quien presidió mi mandato, que nos encargamos de resolver, y ahora se vuelve a desatar con toda la ferocidad que existe en el mundo”.
A su parte, el mandatario hizo mención al tratamiento del acuerdo con el FMI en el Senado, programado para el jueves, y se mostró optimista. “Yo espero que esta semana podamos empezar a poner orden al tema de la deuda tremenda que heredamos con el FMI”, declaró, y agregó: “Vamos a terminar con los especuladores y poner las cosas en orden, en una Argentina que ha sufrido tanto por esos cuatro años”.
Por último, Fernández reafirmó el rumbo y pidió unidad de cara a lo que resta de gestión del Frente de Todos, en referencia a la crisis interna del oficialismo. “Tenemos que seguir con firmeza nuestro rumbo: eso es que todas las dificultades que tengamos que sortear las transitemos entre todos”, demandó, y concluyó: “Por sobre todas las cosas somos peronistas, le ponemos el pecho y buscamos soluciones”.
A su turno, el Gobernador Kicillof ratificó el apoyo al Gobierno de Alberto Fernández, pero no hizo mención algunas sobre el acuerdo con la entidad financiera. Se trata de un tema de divide aguas al interior de la coalición oficialista. “Quiero decirte Alberto que siempre vamos a trabajar articuladamente entre Nación, provincia y municipios. Eso nos convierte en más eficaces, más veloces. Eso nos vuelve invencibles”, sostuvo.
A pesar de figurar en la agenda oficial, el Presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, no participó del acto de inauguración. Desde su entorno aseguran que no fue invitado a la actividad.