BUENOS AIRES (NA) — El futbolista Luis Miguel “Pulga” Rodríguez se irá de Colón de Santa Fe al término de la actual temporada de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), luego de la apretada de la barra brava al plantel.
Así lo confirmó su representante, Roberto San Juan, quien aseguró que el experimentado atacante definió marcharse del club una vez que se concluyan las siete fechas restantes que le quedan al torneo doméstico.
“La decisión del Pulga de irse del club está tomada, lo que pasó no lo soporta nadie. No importa que tenga contrato (hasta diciembre de 2023), esta situación le permite rescindirlo”, indicó el representante en diálogo con el programa radial La Central Deportiva, de Cadena 3.
“En estas condiciones nadie puede pensar en practicar. Si el Pulga tiene que dejar el fútbol lo deja, pero la familia está primero”, dejó en claro San Juan.
En ese sentido, remarcó que “en 6 o 7 días la mujer del Pulga tiene fecha de parto y está pasando momentos malísimos, los hijos no fueron a la escuela”.
Así las cosas, “El Pulga” dirá presente en el entrenamiento del lunes, según consignó su representante. “El responsable de esto es el club. Si querés hacer las cosas con seriedad no podés seguir encubriendo y tapando. Hablé con José Vignatti (presidente del club), pero nunca dice nada”, apuntó.
“Cuando pasó esto, había un dirigente en la práctica. Es muy triste y lamentable. Nadie se hizo responsable. Es una vergüenza lo que pasó. No sé qué están esperando, ¿que maten a un jugador?, ¿que maten a una persona? Hay que tomar medidas”, concluyó.
Las declaraciones de San Juan llegaron el mismo día en el que el plantel de Colón retomó los entrenamientos tras la apretada del martes, aunque con la presencia de custodia policial. El miércoles se había suspendido la práctica.
A pocas fechas del final de la LPF, Colón se encuentra en el puesto número 25 y no puede despegar. Tras la derrota por 2 a 0 contra Talleres el din de semana pasado – la quinta derrota en los últimos siete partidos- el clima se puso tenso.
Tal fue así que un grupo de encapuchados fue hasta el entrenamiento el martes pasado para intimidarlos. Es más, también colgaron una bandera que decía: “Jugadores, dirigentes: con Colón no se jode”.
Paolo Goltz y Ramón “Wanchope” Ábila fueron los jugadores más afectados y comunicaron: “Era un grupo de 30, más o menos, y pidieron hablar con los referentes. Hubo un jugador que reaccionó y ahí empezaron las discusiones y empujones”.