BUENOS AIRES (NA) — Las imágenes de los jugadores argentinos dedicándole la victoria a los neerlandeses a pocos metros de distancia al término de la serie de los penales fue un recorte de la historia. La televisación oficial nunca captó (y por ende, los espectadores tampoco) lo que un video de la cámara cenital reveló después: los europeos habían ido a provocar a Lautaro Martínez segundos antes de que decretara con su gol la clasificación de la Selección a las semifinales del Mundial de Qatar.
Se trata de una toma aérea del estadio de Lusail que dura alrededor de un minuto y 50 segundos en los que –sin detalles– da cuenta de cómo hasta cuatro futbolistas de naranja persiguieron algunos metros al delantero del Inter de Milán cuando comenzó su caminata para patear el penal definitorio. Pese a el sonido es ambiente y no tomó ningún diálogo, la actitud pareció buscar intimidar al argentino antes del remate final. Incluso, un árbitro auxiliar tuvo que intervenir.
Las imágenes de los futbolistas festejando delante de los neerlandeses, varios de ellos tendidos en el piso por la derrota, rápidamente se viralizaron y provocaron una ola de discusiones sobre si faltó ética deportiva, con un sinfín de posturas contrapuestas. Amén de ese debate, faltaba contar dar los acontecimientos previos, que fue la provocación de los jugadores de Países Bajos que finalmente se dio a conocer mediante la cámara cenital.
Hasta el momento, la definición entre Argentina contra los Países Bajos por los cuartos de final fue de las más emocionantes del Mundial de Qatar, pero también una ratificación de la rivalidad histórica entre ambos. A la previa caliente, se sumó un partido marcado por el juego brusco, las decenas de amarillas y los encontronazos entre ambos equipos, que un momento llegaron a irse a las manos tras una patada de Leandro Paredes que causó la reacción rival y un fuerte tumulto.
Por otro lado, el DT neerlandés, Louis Van Gaal, conocido por sus modos provocadores y antipáticos, había destratado el juego del equipo nacional y cuestionado la influencia de Lionel Messi. “En 2014 no tocó una pelota”, dijo sobre el antecedente de la semifinal del Mundial de ese año, que también concluyó con triunfo de la Argentina desde los 12 pasos. Como respuesta, durante el partido de ayer, el 10 de la Selección festejó su gol con “topo gigio” frente al banco de suplentes de Países Bajos, un gesto que fue replicado por otros jugadores de la Selección luego.
Causalidades o no, se trató de la celebración popularizada por Juan Román Riquelme (que en su momento se la dedicó en modo de protesta en Boca al expresidente Mauricio Macri), quien su estadía en el Barcelona durante el año 2001 coincidió con Van Gaal y este lo “borró” del equipo por no coincidir con su sistema táctico. Además, tras el triunfo en la tanda de los penales, Messi fue a increpar directamente al entrenador de Países Bajos y luego lo criticó en conferencia de prensa.
“No me gusta que se hable antes de los partidos. El técnico de ellos no fue respetuoso”, señaló. Y, además, hizo referencia a Wout Weghorst, el autor de los dos goles neerlandeses y el destinatario de su pregunta furiosa “¿Qué mirás, bobo?”. “El 19 nos provocó desde que entró; nos chocaba, nos decía cosas y eso no es parte del fútbol, yo siempre respeto a todos el mundo y ellos no nos respetaron”, relató el astro argentino, quien ha demostrado que ha asentado durante los últimos años su faceta de líder.