Piqueteros se debaten entre el trabajo y la vagancia




NEUQUÉN (ED) — La semana que acaba de terminar dejó en claro que existe una grieta entre los piqueteros neuquinos: por un lado están los que quieren trabajar y, por el otro, los que siguen aferrados a las viejas prácticas extorsivas a las que son llevados por dirigentes (cultores de la vagancia) que lucran con la protesta y que se niegan a admitir que los tiempos han cambiado, tanto a nivel nacional como provincial.

Si hay predisposición, hay trabajo. Y así lo demuestra el convenio que firmó el ministro de Gobierno neuquino, Jorge Tobares, para que la cooperativa Primero de Mayo construya veredas en la ciudad. La otra cara de la moneda la representan los piqueteros que reclaman, marchan y pretenden exigir, pero no cumplen con las exigencias destinadas a darles transparencias a los recursos del Estado.

Hace apenas unos pocos días, dirigentes (intermediarios a los que la nueva administración provincial despojó de sus inconcebibles privilegios) llevaron a un grupo de personas a protestar ante el ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral, aquí en la ciudad capital. El ministerio lo conduce Lucas Castelli, quien viene realizando un exhaustivo trabajo para lograr la inserción laboral de aquellos que realizan un esfuerzo para salir adelante. Las capacitaciones y los acuerdos con organizaciones gremiales dan contundente prueba de ello. El sistema funciona (es evidente) y muchos ya tienen trabajo, pero hay dirigentes que se empeñan en poner obstáculos.

Esos dirigentes presentaron un listado de 215 desocupados que denunciaron supuestas dificultades para inscribirse en las capacitaciones que brinda el plan provincial Emplea Neuquén. También pidieron que sean incorporados al Incentivo de Apoyo a la Empleabilidad y reclamaron la entrega de garrafas.

Con esa lista en mano, el gobierno comprobó que el 40 por ciento no cumple con los requisitos para percibir el Incentivo de Apoyo a la Empleabilidad (ser mayor de 18 años, tener residencia en la provincia de Neuquén, etc.).

También se constató que el 20 por ciento ya recibe la transferencia directa del Estado, y que el 10 por ciento, ya fue habilitado para la percepción del Incentivo, pero no se presentó a conformar su cuenta bancaria. Mientras que el 30 por ciento restante ni siquiera hizo su preinscripción en el plan provincial Emplea Neuquén. Es decir, no les interesa el trabajo o fueron convencidos por sus dirigentes, vaya a saberse.

Por otro lado, el asunto de las garrafas dejó expuestos a los intermediarios, ya que desde diciembre ya no circulan los vales que repartían los dirigentes piqueteros, sino que los beneficiarios deben acercarse de manera personal al Centro de Promoción Comunitaria más cercano a su domicilio, con DNI en mano.

Los tiempos han comenzado a cambiar y si bien falta bastante, ya se adviertes quienes están del lado del trabajo y quienes no.