La decisión de Milei, “nos deja librados a una batalla sin control”, advirtió el activista Jorge Nahuel. Hasta ahora ninguna fiscalía tomó intervención
NEUQUÉN (ED) — La violencia mapuche (un flagelo que ningún gobierno ha logrado erradicar, hasta ahora) afloró con fuerza en este martes de calor extremo; y lamentablemente sembró dudas respecto de lo que pueda llegar a suceder durante el verano. Las amenazas son fuertes -en tono literalmente bélico- y los operadores del sector turístico temen que un nuevo problema se sume al que ya generaron los precios de Brasil. Debe imperar la cordura. El asunto es serio.
Tanto que mapuches radicalizados de Neuquén y de Río Negro amenazaron directamente con desatar “graves consecuencias”. Lo hicieron luego de que el gobierno de Javier Milei le pusiera fin a la falaz emergencia en tierras supuestamente indígenas. Las tierras que reclaman como ancestrales se encuentran en la República Argentina y los mapuches son chilenos. Todo el mundo lo sabe y Miguel Angel Pichetto ha dado cátedra al respecto. Recordó, entre otras cosas, que se trata de “un pueblo invasor”.
Acá, en la provincia de Neuquén, ya habían reclamado “suspender la entrega de permisos o concesiones petroleras en territorios comunitarios donde no se haya realizado la consulta previa”. Quieren frenar el desarrollo de Vaca Muerta, lo que significaría un perjuicio de proporciones para el país en general y para la provincia en particular.
Según un medio nacional, Jorge Nahuel, principal referente de la Confederación Mapuche de Neuquén, aseguró (este martes) que la derogación de la emergencia “nos deja librados a una batalla sin control” y vaticinó que “puede generar enfrentamientos que lleven a situaciones que todo el mundo va a lamentar después”. La amenaza es seria, pero hasta ahora ninguna fiscalía tomó intervención.
Para prevenir atentados y cortes de ruta, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, conformó un escuadrón integrado por oficiales y efectivos de fuerzas federales, que velará por la seguridad de Vaca Muerta.
Activistas mapuches son buscados por el asesinato a un policía en Neuquén, al tiempo que la resistencia ancestral mapuche (RAM) ha provocado incendios en las provincias de Neuquén, Chubut y Río Negro, de hecho, su principal referente, Jones Huala, fue detenido en la zona de Bariloche.
Cabe recordar que, en 2012, dos activistas chilenos asesinaron a José Aigo. El efectivo de la Policía neuquina fue atacado a balazos camino a Pilo Lil, en cercanías de Junín de los Andes, mientras realizaba un control de rutina. Se dice que los agresores realizaban tareas vinculada con la propagación de una especie de guerrilla atada al financiamiento que provee el narcotráfico.
Los asesinos fueron identificados: se trata de Jorge Antonio Salazar Oporto (alias Juan Carlos), quien era buscado por la Justicia chilena por el homicidio de un carabinero en 1997 y de Alexis Cortés Torres, quien era miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Eran los tiempos del Kirchnerismo y aquel homicidio quedó impune.