El diputado Claudio Domínguez se burló de la vicegobernadora. Y una legisladora (aliada de su bloque) se comió los bombones
NEUQUÉN (ED) — La reunión de la comisión legislativa en la que, este miércoles, expuso su defensa la suspendida vicegobernadora de Neuquén, Gloria Ruiz, tuvo un momento grotesco. El protagonista central fue el diputado provincial por el Movimiento Popular Neuquino (MPN), Claudio Domínguez.
En plena reunión, el legislador sacó una caja de bombones y comenzó a repartirlos entre los asesores y secretarios de bloque, como así también entre los diputados.
El gesto -si se quiere, la gentileza- estuvo evidentemente inspirado en uno de los escándalos que se le endilgan a Ruiz: el gasto de más de 4 millones de pesos en bombones, que ordenó comprar a un comercio de Plottier con dinero de la Legislatura.
Los bombones estaban ahí, al alcance de todos. Y una de las que se dio el gustito fue la diputada Carina Riccomini, del bloque unipersonal Juntos. En realidad, Justos no es más que una colectora con la que el MPN intentó causar confusión y rapiñar votos de Juntos por el Cambio, con relativo éxito. Riccomini es la pareja de un tal Brian Marino (referente o ex referente del MPN) que se vio involucrado el escándalo de las macetas (de cemento ordinario) que una supuesta cooperativa le vendió al municipio.
El descargo de Ruiz
Acompañada por sus abogados, Ruiz comenzó a exponer alrededor de las 10 y cerró a las 17:45 con apenas un cuarto intermedio. Entre otros puntos intentó explicar la compra de su camioneta Toyota SW4 en 80 millones de pesos, las contrataciones directas de la Legislatura y el caso de su hermano, Pablo Ruiz, quien está sospechado de haber realizado depósitos en plazo fijo con dinero de la Legislatura que supuestamente no declaró.
En la Justicia, la vicegobernadora está sospechada de la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito. Al tiempo que los diputados analizan si la declaran moralmente inhabilitada para ejercer el cargo.
