NEUQUÉN (ED) — Tras sus participaciones protagónicas en las protestas de los docentes, en los cortes de ruta de los autoconvocados -a los que realiza aportes monetarios- y en cuanta queja surja o ande dando vueltas por ahí, la diputada provincial por el Frente de Izquierda (FIT), Patricia Jure la emprendió contra la Legislatura, de la que por supuesto ya se había quejado.
Primero rezongó por el aumento del 30% para los trabajadores y diputados (se quejó por la mejora a los legisladores) y ahora por las reparaciones en el elegante edificio de la calle Leloir.
“Mientras en esta provincia hay viviendas con piso de tierra y los ceramistas luchan en defensa de las empresas que sostienen a pata y pulmón (con amenazas de desalojos y cortes de luz); en la Legislatura se cambia el piso ¡flotante! por porcelanato. No es cerámica Zanon ni Neuquén (es un verso el compre neuquino)”, dijo.
“Es tan VIP y escandaloso como el dietazo”, sostuvo e instó: “Expropiación y estatización de toda la industria ceramista, bajo control obrero, para la obra pública”.