NEUQUÉN (ED). — Los desaciertos del gobierno de los Fernández (ahora peleados) y sus consecuencias en la economía, convirtieron a la Argentina en un país caro para la inmensa mayoría de sus habitantes y barato para quienes vienen de paso desde países con administraciones más prolijas, como Brasil y Uruguay.
Afortunadamente, la provincia de Neuquén ha logrado esquivar los coletazos de la debacle y hasta ha podido mejorar sus niveles de empleo y de ingresos; lo que constituye un inmenso logro en medio de un escenario nacional con inflación mensual del 6,7%. Y no sólo eso. La provincia también busca oportunidades en la crisis y promociona el turismo puertas afuera.
Este martes se anunciaron vuelos directos desde San Pablo (Brasil) a Chapelco (San Martín de los Andes) y una mayor cantidad de vuelos entre Neuquén y Buenos Aires, que en Semana Santa se vio literalmente colmada de uruguayos, que vinieron de paseo y de compras, como cuando los neuquinos viajaban a Chile por la sencilla razón de que era barato.
En julio próximo, la provincia llevará de las 16, 17 o 21 frecuencias semanales (Neuquén-Buenos Aires) a 28 frecuencias semanales, a partir de un acuerdo con Aerolíneas Argentinas. También en julio, Chapelco pasará de 7 frecuencias semanales a 14 a Buenos Aires; y sumará dos frecuencias semanales a San Pablo. Será un gran impulso para el turismo provincial que fue muy exitoso tanto en el verano como en Semana Santa.
Los vuelos directos a San Pablo fortalecerán la promoción de las bellezas naturales, la infraestructura de servicios y las bondades de la provincia en el exterior; como también lo hará la promoción que este 21 y 22 de abril, Neuquén realizará en Montevideo, Uruguay, para mostrar sus destinos de invierno.
